Con motivo del Día Internacional del Daño Cerebral Adquirido, el pasado viernes algunos de los usuarios y residentes del Recurso de Discapacidad Física de Gran Vía Castellón se desplazaron acompañados por un equipo profesional hasta la Plaza Mayor de la localidad de Castellón invitados por la Asociación-Fundación de Daño Cerebral Adquirido ATENƎU-Castellón, entidad que agrupa a las personas afectadas por Daño Cerebral Adquirido (DCA), a sus familiares y amigos, donde se procedió a la lectura del manifiesto “Una vida salvada merece ser vivida” y a una representación de la canción de Alaska y Dinarama“A quién le importa” con el objetivo principal de reafirmar el compromiso con la defensa de los derechos de las personas con DCA.
El Centro Gran Vía ha tenido su forma particular de celebrar el Día del Daño Cerebral Adquirido programando una serie de actividades, oportunidad especial para poder romper con la rutina y fomentar al máximo posible la cohesión grupal entre los compañeros. Muchos de ellos han optado por compartir públicamente vivencias y experiencias previas al daño sufrido, así como vivencias y experiencias posteriores que les han llenado a nivel emocional tanto o más que las iniciales. Y es que la vida sigue y, según nuestros residentes, hay que vivirla con ilusión y sobre todo con esperanza.
Bajo el lema “Una vida salvada merece ser vivida”, se les ha invitado a crear sus propios eslóganes personales conforme a la situación que están viviendo para posteriormente ponerlos en común y realizar un ejercicio que invitaba en todo momento a la reflexión y a la empatía.
Se han trabajado las tareas propuestas desde un enfoque motivacional, cargado de seguridad, de confianza y que llena de luz un camino que inicialmente, en sus primeros pasos, se presentaba un tanto oscuro.
Han sido unos días llenos de emociones positivas, capaces de remover pasado y presente en nuestros residentes, quienes con su esfuerzo diario añaden valentía y lucha a todo el camino que llevan recorrido y sobre todo, al que les queda por recorrer.
¡¡Nadie dijo que fuera fácil!! así se ha cerrado una jornada exclusiva y representativa.
